Un autor norteamericano de "best sellers", Tom Clancy, describía en uno de sus libros, hace pocos años, el trabajo rutinario de una Agencia encubierta de espionaje, situada en Washington, encargada de identificar sistemáticamente transferencias bancarias en todo el mundo, para seguir el rastro de las redes terroristas. Igualmente detectaba los mensajes encriptados de los sujetos que formaban las redes, para identificar a los autores y receptores de las transferencias en cuestión.
Acto seguido, los agentes de campo de la Agencia, montaban los operativos oportunos y "neutralizaban" limpiamente a los terroristas, sin mucho esfuerzo, allí donde estuvieren.
Realmente las fantasías de Clancy tenían su asiento en una tecnología electrónica ya bien desarrollada, puesta a disposición del público en las tiendas del ramo. Sin ir más lejos, aquí en España un Ministro, hoy Jefe de la Oposición, se jactaba de saber "todo de todos" y se quedaba tan fresco mientras los periodistas que le rodeaban tragaban la saliva con dificultad al oírle, en tanto empalidecían sus rostros.
Es decir, el espionaje mundial "globalizado", en todas las direcciones, se lleva a cabo actualmente ante las pantalla de los ordenadores y ya no se necesitan espías ni venidos del frío ni de ninguna otra parte.
De aquí que extrañe tanto leer en los diarios noticias sobre los incidentes de la ajetreada vuelta desde Moscú del avión presidencial de Bolivia, sospechoso de esconder al ex-asesor de la Agencia de la Seguridad Nacional (NSA) de USA, lo cual ha resultado ser una vulgar especulación, sin apoyo electrónico, una auténtica chapuza, que ha dado lugar a incidentes diplomáticos, nerviosismos, acusaciones desmesuradas y hasta insultos y desmelenamientos. Cualquier Jefe de Estado, debería saber que hoy puede adquirir un kit completo para espiar a sus vecinos próximos o alejados, poniéndose en contacto con nuestro ex-ministro citado, quien les atenderá con mucho gusto.
Creo que el escándalo ha surgido cuando los mandatarios de occidente se han dado cuenta que sus aliados también les espiaban directamente a ellos: ¡¡¡qué falta de confianza!!! Graciosa foto, por cierto.
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